El mercado de la vivienda ha empezado el año con buenos números. Tras registrar en 2021 la mayor cifra de compraventas desde 2007, en enero la ha registrado un crecimiento interanual del 31%, según el INE.
Y todo apunta a que la tendencia se mantendrá en el resto del ejercicio, a pesar de que nos encontramos en un momento de incertidumbre, marcado por una elevada inflación, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, unos altos precios energéticos y una ralentización económica.
Toni Expósito, CEO de Comprarcasa, cree que 2022 será un año positivo para el sector inmobiliario en nuestro país y explica que su optimismo “se basa, precisamente, en la fortaleza del sector inmobiliario, que ha quedado demostrada con los buenos datos de este 2021, donde hemos dejado atrás el pequeño receso de los momentos más duros de la pandemia para situarnos en niveles similares o incluso superiores a los de 2019”.
Emiliano Bermúdez, director general de donpiso, también habla del buen momento que atraviesa el mercado residencial y afirma que “lo que estamos viendo es que el mercado no ha perdido crecimiento”.
Por su parte, Xavier Aránega, socio director de Revel, recuerda que en España existe un gran recorrido de crecimiento, ya que la vivienda es más barata que en otros países europeos, “y eso lo hace aún más interesante”, destaca Aránega. Además, es unas de las economías continentales que arrastra un déficit de viviendas.
Iñaki Unsain, presidente de la Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario (AEPSI), se une a esta teoría y defiende que “es un buen momento para los compradores que quieran invertir en viviendas para alquilar o reformar-vender”. Y está convencido de que “surgirán oportunidades de inversión con unos mejores precios que mejorarán la rentabilidad”.
Por ejemplo, porque muchos propietarios se vean obligados a vender inmuebles y decidan bajar precios para cerrar la operación en el menor tiempo posible.
“En entornos volátiles es cuando suelen emerger oportunidades interesantes”, reconoce Vicens Ramón, gerente de RTV Grupo Inmobiliario. Por eso, recomienda seguir de cerca la evolución del mercado y estar atentos a nuevos activos que entren. “Al final, un buen activo bien ubicado tiende a incrementar su valor, independientemente de las fluctuaciones de mercado”, recalca.
Y todo ello sin olvidar que la vivienda siempre ha sido considerada como un valor refugio en situaciones de incertidumbre como la que estamos viviendo actualmente, lo que podría suponer un crecimiento añadido para el mercado.
Desde Comprarcasa, Expósito recuerda que “las viviendas son un activo con menor volatibilidad que otros” y que “un mercado con una oferta y demanda constante, tanto para la compraventa de vivienda habitual, como opción de inversión para comprar con vistas a obtener rentabilidad a corto-medio plazo con una renta de alquiler”.
Desde Revel y RTV Grupo Inmobiliario también creen que las crisis son un gran momento para invertir. “Actualmente, la alta volatilidad de los mercados y la ralentización económica provocada por la guerra de Ucrania hacen de la renta variable una opción menos atractiva y con poco recorrido para maximizar nuestros ahorros”, recalca Vicens Ramón.
El gerente califica a la vivienda como una «alternativa robusta y sólida de inversión» y recuerda que “los activos inmobiliarios se valoran en función de la renta que pueden generar y la rentabilidad exigida por los inversores para invertir (‘yield’) o rendimiento proporcional de los beneficios de una actividad económica».
Y añade que «las rentas acostumbran a estar indexadas a la inflación, así que los activos inmobiliarios mantendrían su capacidad de generar ingresos”, mientras que el ‘yield’ se puede incrementar en los próximos meses, en el marco de una posible subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE).
Desde RTV también ponen sobre la mesa otro factor que podría impulsar el mercado de la vivienda: “Todavía hay mucha demanda insatisfecha que debería haberse realizado durante los años de la pandemia, y los altos niveles de inflación (y la previsión de que se mantengan en el medio plazo) atraerán a inversores al mercado residencial, incrementando el número de transacciones”, concluye Vicens Ramón.
Por último, otro punto a favor para el mercado de la vivienda es que todo apunta a que la oferta hipotecaria seguirá siendo competitiva, a pesar de que los expertos afirman que la era de los préstamos más baratos de la historia ha llegado a su fin y que los tipos de interés empeorarán a partir de ahora. El motivo es que no se espera un cambio brusco de los tipos de interés, por lo que las condiciones de financiación deberían ser favorables a corto plazo.